jueves, 20 de enero de 2022

Enanos

 
La raza de los enanos proviene de la Infraoscuridad. Los mitos originarios de la raza enana hablan de una guerra y un terrible mal que llevó a los enanos a separarse en diferentes tribus y excavar hacia arriba para huir de él: el Éxodo de la Ascensión. Algunas tribus fueron aniquiladas cuando excavaron hasta llegar al fondo del oceáno. Esta es la razón del miedo atávico al mar y a las grandes extensiones de agua que tienen los enanos, que en su mitología se identifica con el infierno. Las tribus con mejor suerte excavaron hasta llegar a una cueva muy grande con una bóveda muy alta tapizada de gemas brillantes, la más grande de las cuales refulgía tanto que quemaba los ojos: el mundo de la superficie. Los enanos decidieron que su éxodo había acabado, y cada tribu construyó un reino-fortaleza debajo de las montañas del mundo de la superficie.

Enanos primordiales

Las leyendas afirman que los enanos de carne y hueso provienen de una raza de enanos primordiales de naturaleza elemental. Los enanos primordiales tienen carne de piedra, huesos de hierro y órganos de diamante. Por sus venas no corre sangre sino oro fundido. Creados por el dios Daenthar en las entrañas de la tierra, los enanos primordiales se alimentan de metales preciosos y gemas. Los enanos de carne y hueso son sus descendientes, y de ahí viene la capacidad racial de los enanos de olfatear oro y piedras preciosas.

Las estirpes de enanos más antiguas, lo que podemos llamar la nobleza de su raza (aunque el concepto de "noble" es muy diferente del humano) manifiestan esta herencia de forma visible: barbas doradas, piel pétrea, ojos diamantinos, mayor fuerza, resistencia y longevidad.

Cultura enana

Los enanos son de naturaleza legal. Un enano puede apartarse de este alineamiento por sus actos, sobretodo si vive en la superficie alejado de sus congéneres, pero no es lo normal. Los enanos tienen un comportamiento y una psicología difícil de entender para los humanos. La vida de la mayoría de los enanos consiste principalmente en una sóla cosa: trabajar. La pereza es un concepto incomprensible para un enano. Si los humanos trabajan para vivir, los enanos viven para trabajar. Esto no es una frase hecha: literalmente, si un enano no tiene nada que hacer, sufre un colapso y se muere. Esta es la razón por la cual todos los aspectos de la sociedad enana consisten en tareas titánicas e inacabables. Por ejemplo, en un reino-fortaleza enano a cada ciudadano le corresponde cada cierto tiempo construirse una nueva casa y una nueva tumba de acuerdo a normas bizantinas incomprensibles para un humano. Lo mismo sucede con todos los aspectos de la sociedad enana. Como consecuencia de esto las ciudades enanas están en su mayor parte deshabitadas, repletas de estancias y tumbas vacias, enormes arsenales y toda clase de monumentos repetidos una y otra vez.

Aparte de la mineria, la construcción y la artesanía, los enanos tienen "aficiones" que mayormente consisten en MÁS trabajo. El ejemplo típico de afición enana es la construcción de laberintos. Los enanos odian los grandes espacios abiertos. Esto no quiere decir que sean agorafobicos, son capaces de salir al mundo de la superficie pero les parece terriblemente feo y aquellos que viven en él unos desgraciados. Un entorno "bonito" para un enano es un lugar de espacios cerrados, sin líneas rectas demasiado largas, es decir, que mires dónde mires siempre veas una pared. Por esa razón un laberinto es el equivalente enano a un bonito parque o un jardín.

Un humano generalmente intentará gastar su tiempo de la forma más eficiente, por ejemplo fabricando 10 herramientas en vez de una en la misma cantidad de tiempo. Para un enano, sucede exactamente lo contrario. Si un enano puede invertir un año en vez de una semana en crear un arma o una herramienta, así lo hará. Si puede fabricar una sóla herramienta con un nivel de detalle y esfuerzo casi demencial en vez de 10 herramientas más sencillas, así lo hará. Esta es la razón de la legendaria calidad de la manufactura enana. Sin embargo, cuando un humano le hace un encargo a un enano haría bien en ser paciente: se han dado casos de pedidos entregados a los hijos o los nietos de un cliente. El hecho de que los enanos tengan vidas mucho más largas que las de los humanos es también parte del problema.

Los enanos carecen de creatividad, esto no quiere decir que no sean inteligentes, simplemente son incapaces de innovar y basan toda su producción artística en la repetición de los mismos patrones, una y otra vez. Por esta razón los enanos son grandes amantes de la simetría y la redundancia. No te extrañes cuando al acudir a presentar tus respetos a un rey enano atravieses varias salas del trono, todas exactamente iguales: es la manera enana de expresar grandiosidad.

La única excepción a esto son los enanos borrachos y los locos. Cuando los enanos se topan con un dilema que son incapaces de solucionar, como último recurso se pillarán una tremenda cogorza. Sucede algo extraño cuando un enano se emborracha, en cierto modo se "humaniza" y se vuelve capaz de proponer soluciones creativas a los problemas.

Runas mágicas

Cuando un enano se vuelve loco empieza a ver patrones que nadie más comprende: es capaz de crear runas mágicas. Si sus hermanos enanos consiguen evitar que se coma su propia barba o se mate a cabezazos contra las paredes y le suministran materiales valiosos y una forja, el enano loco se pondrá a fabricar objetos mágicos. Este el motivo por el que los enanos son dueños de tantas creaciones legendarias, aunque casi nunca las comparten.

Religión enana

Los enanos locos son lo más parecido a un clero que tienen los enanos, ya que se les considera bendecidos por Daenthar, dios de la Tierra y la Forja, el Gran Rey y Padre de los enanos. La religión enana es múy particular. Los enanos sólo rinden culto a Daenthar, aunque respetan al resto de dioses de la Ley. La noción de culto enano consiste sobretodo en la memorización de largas listas de antepasados, la lectura de enrevesados códigos legales y la construcción de monumentos. En medio de estas ceremonias cuidadosamente calculadas que pueden durar días, los enanos locos deambulan libremente haciendo toda clase de estropicios y locuras, que son observadas y registradas con gesto serio por los asistentes para su posterior juicio e interpretación religiosa.

Maldición del enano gris

Si un enano pasa demasiado tiempo en el exterior comienza a sufrir un profundo cambio, una enfermedad de la mente y del cuerpo. Su piel se volverá progresivamente de color gris y sus ojos se inyectaran en sangre, hasta volverse completamente rojos. El enano se volverá cada vez más agresivo, hasta perder la cordura por completo y convertirse en un loco rabioso. El enano gris pierde la capacidad de hablar y razonar, no distingue amigo de enemigo, y se lanza a la matanza con gritos babeantes a la mínima oportunidad. Los enanos grises sólo se calman cuando beben la sangre de sus victimas y se bañan con sus vísceras. Viven en cuevas y lugares apartados, desnudos como salvajes, aunque todavía conservan sus armas y saben como usarlas. Como todos los enanos locos, los enanos grises son capaces de manifestar runas mágicas. En el caso de los enanos grises, runas sangrientas aparecen en sus armas a medida que van cometiendo matanzas, volviéndose cada vez más peligrosos. Si nadie lo detiene, el enano gris puede convertirse en una terrible amenaza. Finalmente, los enanos grises acaban desarrollando cierto raciocinio maligno, que los impulsa a volver a las profundidades y unirse a la raza de los enanos malditos, conocidos como los Duérgar.

Debido a esta maldición los enanos tradicionales no suelen pasar más de unos pocos meses en el mundo de la superficie. Pero cuando un enano se ve obligado por las circunstancias, o cuando ha sido exiliado, la única forma de alejar la sed de sangre y evitar la maldición consiste en la ingesta de alcohol, por lo que llegado a cierto punto pasará la mayor parte de su tiempo borracho. Recuerda, para un enano en el mundo de la superficie beber alcohol no es un lujo, es una necesidad. 

Parias

La mayor parte de la raza de los enanos jamás ha puesto un pie en el mundo de la superficie. El castigo más grave para la sociedad enana, peor que la muerte, es el destierro al mundo de la superficie. Este terrible castigo afecta no sólo al enano culpable sino a toda su familia. Los enanos desterrados y sus descendientes se convierten en parias para los "verdaderos enanos".

Los descendientes de una enano exiliado pierden la longevidad de su raza pero acaban aclimatandose en parte a vivir en el mundo de la superficie (se "corrompen" desde el punto de vista de los enanos tradicionales), por lo que no hace falta que estén todo el rato borrachos para evitar la maldición del enano gris. Sin embargo, si permanecen sobrios demasiado tiempo acabarán contrayendo esta terrible enfermedad.

Los personajes enanos de nivel 0 en mi ambientación de Clásicos del Mazmorreo son parias. Si sobrevive a un embudo, el jugador puede decidir que el personaje abrace su herencia racial, tomando la clase enano, o bien puede elegir otra clase, aunque en ese caso no podrá acceder a los rasgos raciales enanos (excepto los que ya tiene a nivel 0).

Nota: algunas ideas las he sacado de Goblin Punch.

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